En las últimas semanas, el conflicto ha seguido aumentando y han aparecido pintadas racistas e insultos como ya ocurrió en 2007 con la Casa de las Americas.

Adjuntamos un comunicado de Tania Cañas de la Oficina de Inmigración y Derechos Sociales de ESK y varias noticias que hoy recogen los medios.

• Las pintadas racistas en Zaramaga calcan el 'modus operandi' de otros ataques xenófobos en Vitoria
• El racismo ensucia Zaramaga con pintadas, insultos y esvásticas contra la mezquita y los musulmanes

CON EL CONFLICTO DE LA MEZQUITA DE ZARAMAGA ESTA TOMANDO FUERZA LA XENOFOBIA Y EL RACISMO EN GASTEIZ

En los meses transcurridos desde que se conociera que la comunidad Pakistaní quería instalar una mezquita en una lonja de Zaramaga, la xenofobia y el racismo latentes que esta dura crisis está agravando, han ganado puntos en nuestra ciudad. La respuesta de las personas y colectivos del barrio de Zaramaga contrarios a la mezquita, ha sido rápida, intensa, permanente y con mucho eco público y mediático.

La réplica de la parte de la ciudadanía que defendemos los derechos y libertades en general y para el caso concreto los de la comunidad Pakistaní a abrir este local de rezo y que nos hemos solidarizado con su causa va creciendo poco a poco, pero es todavía muy escasa. Y sobre todo, se echa en falta el apoyo explícito de sindicatos, de la mayoría de los partidos políticos, de organizaciones sociales y ONGs. También son muy pocas las personas “conocidas” de Gasteiz, cuya opinión favorable a la mequita, puede resultar un punto de referencia muy valioso para ir acumulando la solidaridad que la comunidad Pakistaní necesita. La labor pedagógica para intentar convencer a quienes se oponen a la apertura de la mezquita de Zaramaga es loable y se debe seguir haciendo. Sin embargo y más en los tiempos que corren, los argumentos tópicos que usan quienes se oponen a considerar que la gente inmigrante debe ser tratada en las mismas condiciones de igualdad de derechos que la gente autóctona, no se desmontan por la vía del razonamiento. Porque dichos argumentos no se soportan en datos reales cuando alertan sobre los peligros y los males que nos vienen de los y las inmigrantes, sino en prejuicios xenófobos y racistas que se blindan a través de sentimientos negativos e ignorancia que no se quiere superar. Si no queremos que los sentimientos xenófobos y racistas se sigan extendiendo, disfrazados de legítimas preocupaciones ciudadanas, hay que denunciarlos públicamente y hay que ponerse decididamente del lado de aquella gente inmigrante perjudicada por dichos tópicos, que las hay, y cada día más.

Nos jugamos mucho en Gasteiz (y seguramente más allá también…) con el desenlace que tenga en los próximos meses este tema de la mezquita de Zaramaga. Si finalmente se consigue desanimar y hacer desistir a la comunidad Pakistaní de su voluntad de abrir la mequita donde inicialmente lo tenía previsto (desistimiento en el que el alcalde del PP Sr. Maroto parece querer jugar a fondo), el éxito de movilizaciones reaccionarias contra las personas inmigrantes, habrá ganado muchos puntos. En el futuro nos encontraremos reacciones similares que se apuntarán a una experiencia que ya ha sido ganadora. La comunidad Pakistaní que quiere abrir una mezquita en Zaramaga tienen otra manera de movilizarse y pedir apoyos; pero han mostrado que valoran mucho las expresiones de solidaridad que se les haga y eso es fundamental para construir una convivencia entre todas y todos.

Por ello las organizaciones que somos sensibles en la lucha contra el racismo y la xenofobia y que estamos por el respeto de todos los derechos para todas las personas no podemos perder ni un día más a la hora de ofrecer nuestro apoyo solidario en esta causa. Nos jugamos mucho, insisto, si finalmente triunfa en Gasteiz la negativa a permitir la libertad de culto para todas las personas. Tania Cañas Siriany. Oficina de Inmigración y Derechos Sociales de ESK.