La iniciativa, promovida por Retinosis Retina Begisare, incluye un llamamiento a que las personas con discapacidad visual utilicen el distintivo “Tengo Baja Visión”
Cuando una persona que tiene discapacidad visual se pone a la cola para entrar en un comercio, es posible que vea el principio de la fila, pero no el final, si tiene visión en túnel. Al avanzar la cola, se moverá, pudiendo chocar con quien tiene más cerca, situación que será, cuando menos, incómoda. Esta es solo una de las múltiples circunstancias en las que se encuentran las personas con baja visión y que puede dar lugar a situaciones de riesgo y malentendidos.
En España al menos un 2 % de la población tiene baja visión o es ciega, es decir ve entre 0 y un 30 % pero, a menudo, no se percibe porque, en muchos casos, los ojos están aparentemente sanos. Las nuevas normas de distanciamiento social para evitar contagios de la covid-19 han traído aparejadas mayores dificultades para quienes sufren esta discapacidad. Retinosis Retina Begisare, entidad que agrupa a personas ciegas o con baja visión de Euskadi, lanzará una campaña con la que quiere sensibilizar a la población sobre el problema y hacer un llamamiento para que sea comprensiva. Apartarse al cruzarse con una persona con discapacidad visual, prestar especial atención a guardar la distancia de seguridad y advertir verbalmente de posibles riesgos son ejemplos de cómo la población puede contribuir a que la interacción social de las personas con baja visión sea más fluida y segura en estos momentos de excepcionalidad.
“Además del conjunto de normas de distanciamiento, el hecho de que este colectivo necesite acortar distancias para poder leer o tenga que recurrir en mayor medida al tacto, nos sitúa en una posición más vulnerable ante el contagio, lo que nos genera más tensión”, explican desde Retinosis Retina Begisare, integrada por personas que padecen retinosis pigmentaria y otras distrofias de retina, todas ellas enfermedades incurables. “Esta campaña -aseguran- tiene también otra dimensión clara: la de contribuir a que la enfermedad no se propague”.
La campaña se completará con la recomendación a quienes padecen una discapacidad visual de que utilicen el distintivo “Tengo Baja Visión” en cualquiera de sus soportes: chapa, visera, brazalete… Así, siendo reconocibles, se facilitará la interacción social.
Finalmente se utilizarán las redes sociales para divulgar la iniciativa “Tenlo en cuenta”, cuyo objetivo es informar sobre situaciones que generan incomprensión.
El distintivo se puede usar solo o acompañando al bastón blanco o perro guía, indicando con ello que quien lo usa tiene un resto útil de visión, es decir, que no es completamente ciega.
La baja visión es un grado menor que la ceguera y hoy por hoy no tiene cura. Sus síntomas se presentan en forma de visión borrosa, pérdida de visión central, de visión periférica o de una parte del campo visual. La degeneración macular, el glaucoma, la miopía magna, la retinopatía diabética, la retinosis pigmentaria y otras distrofias hereditarias de retina o la aniridia son algunas de las enfermedades que causan baja visión. En España, más de un millón de personas tienen esta condición.